La Asociación Mutual El Principito (AMEP) debe su condición actual, tanto en términos de la calidad del servicio educativo que desarrolla así como con respecto a su dimensión sociocomunitaria, a una experiencia que comenzó hace más de cuatro décadas. La misma fue iniciada por un grupo de entusiastas mujeres en el año 1973, vecinas de la ciudad de Miramar, quienes cristalizaron la necesidad de contar con un establecimiento de educación inicial a través de un emprendimiento mutualista.
Así, surge AMEP y, en consecuencia, a partir de dicho acto fundacional, se crea el Jardín de Infantes El Principito, primer hito en el derrotero institucional. Inicialmente, se sitúa en un espacio cedido en préstamo en la villa San José, trasladándose luego de algunos años hasta el lugar donde reside desde el 11 de octubre de 1982. Sucesivas adquisiciones y ampliaciones edilicias, que implicaron la resignificación de inmuebles destinados a otros quehaceres, por ejemplo, la transformación de un frigorífico y una lavandería en un espacio educativo, permitieron disponer de una infraestructura propia importante. Dicho esfuerzo y compromiso asociativo se evidencia hoy a través de una comunidad integrada por 120 trabajadores (entre docentes y personal de servicios), 950 alumnos (distribuidos en tres niveles educativos: Inicial, Primario y Secundario) y 570 socios.
El sostenimiento presupuestario del emprendimiento descripto resulta a partir de la subvención estatal (provincia de Buenos Aires) y de una cuota societaria, esta última destinada a solventar las erogaciones provenientes de la prestación de todos los servicios personales así como de aquellos bienes de uso y consumo propios de un establecimiento escolar. Cabe señalar que, en la actualidad, se cuenta con diversas dependencias que ofrecen prestaciones materiales que redundan en beneficio del desarrollo académico (laboratorio, gabinete de computación, biblioteca, buffet, gimnasio, sala multimedia, sala de danza, etc.).